
Aunque he de reconocer que estas fiestas no son precisamente santo de mi devoción, teniendo en cuenta que hay mucha gente a la que le encantan estas fechas y las viven con auténtica fruición, quiero desearles a todos unas felices fiestas. Espero de todo corazón que esta sea, para todos, la última vez que se pida algún deseo, por el simple hecho de verse todos cumplidos.